¿Me siento bien en mi cuerpo?

Si no te sientes bien o no luces como te gustaría, tu cuerpo encuentra la manera de trasladar esa sensación al resto de aspectos de tu existencia, y esta es la razón por la que hacemos hincapié en la importancia de que recuperes tu equilibrio y bienestar físico. No hay nada en el Universo que responda con mayor rapidez a tus pensamientos que tu cuerpo, por eso los pensamientos sintonizados aportan una respuesta rápida y resultados obvios.

En realidad, tu bienestar físico es una de las cosas más sencillas sobre las que puedes tener el control absoluto, pues es lo que estas haciendo respecto a ti. Sin embargo, como en este mundo todo lo interpretas a través de la lente de tu estado salud físico, si no estás equilibrado, te puede afectar negativamente en muchos otros aspectos de tu vida.

Nunca tienes más claro que deseas estar sano que cuando estás enfermo, así que la experiencia de estar enfermo es un poderoso trampolín para desear el bienestar. En el momento en que tu enfermedad te hace pedir encontrarte bien, en ese mimso momento, si fueses capaz de dirigir tu atención hacia la idea de estar bien, la recuperación se produciría de inmediato; pero para la mayoría de las personas cuando se sienten mal, es precisamente ese malestar lo que acapara su atención. Cuando estás enfermo es lógico que observes cómo te encuentras, y al hacerlo, prolongas la enfermedad... pero no ha sido tu atención a la falta de salud lo que te ha enfermado. Ha sido tu atención a la falta de muchas de las cosas que deseas.

La atención crónica a las cosas no deseadas te mantiene en una postura que obstaculiza tu bienestar, a la vez que no permite soluciones para los otros temas que te preocupan. Si pudieras centrar tu atención en la idea de experimentar la salud con tanta pasión como la que pones cuando te falta, tu recuperación no sólo se produciría rápidamente, sino que también mantendrías con facilidad tu equilibrio físico.

Fuente: El dinero y la ley de la atracción, Esther y Jerry Hicks